viernes, 21 de agosto de 2015

OPERACIÓN U.N.C.L.E. de Guy Ritchie


   Si en sus "pelis" sobre Sherlock Holmes Ritchie si conseguía modernizar un poco al personaje, a pesar de mantenerlo en su época original,  y mantener el equilibrio entre el tono irónico y el respeto hacia el personaje (aunque aquí los fans del Sherlock literario puede que no estén de acuerdo) consiguiendo dos cintas bastante dinámicas y entretenidas, especialmente la primera ya que en la segunda se le iba de las manos el "toque Ritchie", en esta ocasión no lo ha logrado quedandose a medio camino, o incluso más atrás, entre intenciones y resultados.

   Y el problema no es que no haya acertado con el tono en esta ocasión, sino que parece no haberse decidido por ninguno saltando de manera intermitente de la parodia pura y dura, los personajes reducidos a puro estereotipo; el homenaje a las cintas de espías de los 70, no solo por la ambientación y las canciones de la banda sonora sino por como están rodadas muchas de las escenas; los toques modernos en su realización, esas escenas de acción rodadas al estilo actual con continuos cambios de plano y cámara en "tembleque" continuo; pero sin decidirse a mezclarlos del todo o no acertando al hacerlo.

   Así la ironía solo funciona en determinados momentos, la escena de arranque; Solo (Henry Cavill) preparando el sofá para desmayarse al descubrir que le han drogado; lo que ocurre al fondo mientras Solo y Kuryakin (Armie Hammer) discuten sobre que hacer con el rehén, y poco más. En la parte homenaje esta muy lograda la ambientación para se sobresatura la cinta de canciones de la época en detrimento de una banda sonora original... vamos que hay canciones hasta en los momentos en que se necesitaba música de fondo; y en la parte de acción es todo tan confuso, especialmente en las peleas cuerpo a cuerpo que uno no se entera de lo que pasa.


   Para los conocedores de la serie original decir que Ritchie a optado por hacer lo mismo que en los casos de EL EQUIPO A o THE EQUALIZER, es decir, montar la cinta como una precuela de la serie contándonos el primer caso en el que Napoleon solo e Illya Kuryakin trabajan juntos y que desemboca en la creación del U.N.C.LE. El problema es que en los personajes apenas reconocemos nada de los personajes de la serie, aunque el "detallito" de la recepcionista del hotel soltando lo de "¿en que más puedo ayudarle?" que de pie a Solo para... (Ya os imaginais que), y que era muy habitual en la serie original, tiene su gracia.

   Las comparaciones son odiosas y Cavill y Hammer se quedan muy lejos de Robert Vaughn y David McCallum (los Napoleon Solo e Illya Kuryakin originales) pero también hay que reconocer que no es culpa suya sino de un guión que al reducir sus personajes al tópico extremo no les permite apenas hacer nada. Así Cavill es el típico agente secreto guaperas que ni se inmuta ni se despeina nunca y Hammer es el típico agente ruso sin sentimientos y que parece que no ha salido nunca de su pueblo. Podría ser gracioso, podría, pero el guión apenas saca partido a ello, salvo en la mencionada escena del sofá de Cavill o el momento en que Hammer tiene que fingir ser un cobarde y no puede liarse a puñetazos, o en esa discusión sobre moda cuando tienen que elegir un traje para Alicia Vikander. únicos momentos en que se intuye que con un buen material estos muchachos podrían dar bastante de si. Una pena.

   Si a todo esto añadimos una historia sin fuerza, unos villanos muy poco "villanos", un final anticlimático, un... bueno os hacéis una idea. Decepcionante y aburrida



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