MISIÓN IMPOSIBLE. NACIÓN SECRETA

de Christopher McQuarrie

  Nueva entrega de las aventuras de Ethan Hunt que, siguiendo la estela de la anterior, PROTOCOLO FANTASMA, cuenta entre sus mayores virtudes el no tomarse demasiado en serio a si misma rematando los "momentazos" inverosímiles de la trama con un chistecillo irónico y transformando lo que podría ser un "¡anda ya!" en un espectáculo dinámico y siempre divertido.

   Como es habitual en la saga Hunt es declarado en rebeldía tras caer en una elaborada trampa, a lo que hay que sumar que el jefe de la CIA (Alec Baldwin) ya le tenia algo de ganas, y tiene que resolver una complicadisima misión en solitario... bueno en solitario no porque cuenta con algún que otro aliado pero sin ayuda oficial, enfrentándose tanto a los malos de turno, en esta ocasión una siniestra organización llamada EL SINDICATO, como a los "buenos" ya que es perseguido por su propio gobierno, en esta ocasión la CIA con Baldwin al mando.

Dato irónico: el personaje de Baldwin que parece empeñado en cerrar la FMI (Fuerza Misión Imposible) por sus métodos salvajes y expeditivos no se corta un pelo en dar la orden de "en cuanto lo vean disparen a matar", osea utilizar esos métodos por los que persigue a la FMI.

   Adrenalítica, entretenida y divertidisima cinta de acción, de esas que apenas dan un respiro al espectador, vamos que de la espectacular escena de arranque se pasa a una emboscada, de ahí a una Hitchcockiana escena en la Opera de Viena, de ahí... vamos acción a raudales. Y como suele pasar en las franquicias lo del "más difícil todavía" es la nota predominante, aunque como ya he comentado la inverosimilitud de algunos momentos se suaviza con los toques de humor, por regla general a cargo de Simon Pegg (ver su reacción tras el incidente con el coche, por ejemplo) aunque eso no quiere decir que renuncie a algunos momentos "¡eso es imposible!" (ese momento con Cruise escalando la columna en la que ha sido esposado).

   Todo el reparto cumple a la perfección, tanto los ya conocidos en la saga: Cruise, que aquí recibe más palos de lo habitual y muestra una ironía poco habitual en Hunt; Simon Pegg, cada vez con más peso especifico en las tramas; Renner, con menos papel que en la anterior pero sus escenas "no puedo confirmar ni desmentir nada..." confirman su carisma, y la reaparición del siempre solvente Rhames con más papel después de su simple cameo de PROTOCOLO FANTASMA.

   Y también los nuevos en la franquicia: Rebecca Ferguson que se maneja con igual soltura como heroína de acción que de seducción componiendo un personaje que nunca sabes en que bando esta; Alec Baldwin (ver su rostro en el momento en que se descubre que...); ese siniestro malvado que compone Sean Harris, que quizás hubiese necesitado de más momentos en pantalla y Simon McBurney como el jefe del espionaje Ingles.

   En la dirección y en el guión Christopher McQuarrie, con el que Cruise debió hacer buenas migas durante el rodaje de JACK REACHER, y que seguro que es responsable de buena parte de esos momentos irónicos e incluso absurdos integrados en la acción como esos andamios que no paran de subir y bajar (no diré porque) durante la pelea en la Opera, ese momento en que todos los personajes se cruzan en el mismo sitio en Marruecos... y no sigo para no acabar con SPOILERS.

   En definitiva entretenidisima y divertidisima. Si la saga sigue por este camino bienvenidas sean las próximas Misiones Imposibles.