MAGICAL GIRL + LA ISLA MINIMA
Esta semana el Cinestudio D´or de Valencia ha preparado un programa doble con dos de las cintas con mayor numero de nominaciones a los Premios Goya. Y después de asistir a la sesión no puedo quitarme la sensación de "¡Que películas más aburridas nominan a los Goya!".
Precedidas de buenas criticas ambas y de un considerable éxito de publico en el caso de la segunda (intente verla la pasada fiesta del cine y no conseguí entradas) lo cierto es que ambas me han resultado o bien aburridas, sobretodo la primera, o bien tremendamente decepcionante, especialmente la segunda.
MAGICAL GIRL (Carlos Vermut)
Yo se que a mi personalmente los ritmos pausados y lentos no suelen convencerme, para que esto funcione la historia a contar tiene que ser o bien apropiada para el rimo o muy interesante para que este no termine agotando, pero en esta ocasión no sucede.
¿Hacían falta dos horas largas para contar lo que se nos cuenta? Yo creo que no, y no es que no ocurran cosas, en una cinta de historias cruzadas eso es prácticamente imposible, pero el ritmo (es un decir, porque este es prácticamente inexistente) provoca la sensación de que no pase nada,. Y a esto hay que añadir la apatía de los actores, impuesta por el director sin duda para que las interpretaciones se desarrollen en función del “ritmo” de la cinta y que provoca que la cinta se te haga larga, es mas agotadora.
Hace falta algo más que una situación dramática para que esto funcione, vamos que hace falta algo más que sacar a una niña con leucemia terminal para que la situación resulte dramática y no un simple recurso para conseguir tal fin. El atonismo (¿se dice así?) de los actores provoca que, por ejemplo, las escenas entre padre e hija en la que esta le pide poder fumar o beber alcohol para saber lo que se siente en lugar de entrañables resulten risibles.
Por si esto fuera poco se nos ocultan detalles del argumento, y no la escusa de "es que te gusta que te lo den todo mascado" no me vale sobretodo si esa información es necesaria para dotar de lógica las reacciones de algunos personajes.
Pero vamos que igual me equivoco y ese minimalismo de guión y de puesta en escena es el no va más, pero cuando muchas criticas positivas que he podido leer empiezan con aquello de "no es una película para todos los paladares" es que... (y lo dejo así para que intuyáis lo que sigue como en la "peli")
LA ISLA MÍNIMA (Alberto Rodríguez)
Reconozco que se agradece que de vez en cuando el cine español pruebe a salirse de lo que solemos llamar “españoladas” y pruebe con el cine de genero. El problema suele ser que parecen incapaces de dejar de ser “españoles” y no pueden evitar una de estas dos cosas, o meter drama (o mejor dramón) en la trama que muchas veces provoca que te salgas de la trama principal, o las referencias al "pasado histórico" que en muchas ocasiones es tan intrascendente para la historia que no solo te corta el ritmo sino que lejos de aportar el supuesto interés que sus responsables creen que aporta termina siendo contraproducente y cansino (¿Durante cuanto tiempo necesitan repetirnos que la dictadura fue mala?).
En principio tenemos un argumento clásico de cine policíaco. Pueblecito aislado y pequeño sin, policía propia, que cuando se comete algún crimen, en este caso la desaparición de dos niñas, se envía a dos “polis” de ciudad. Policías con drama a cuestas, uno de ellos prometedor detective castigado por enfrentarse a un superior (en este caso a un militar introduciendo el primer elemento del “pasado histórico” que no tiene relevancia más allá de repetir otra vez lo mal que fue la dictadura, ya que acaso en el presente no puede degradar a los detectives) y el otro con una enfermedad, que los responsables de la cinta utilizan para introducir unas escenas oníricas con pajaros o la subtrama de la médium que luego no van a ninguna parte, y con un oscuro pasado durante la dictadura (otra trama de “pasado histórico” que se supone que dota de mayor profundidad al personaje pero que acaba resultando puramente anecdótica para la historia).
Si a esto añadimos que la historia se centra en los "polis" y salvo en los primeros minutos los habitantes del pueblo apenas tienen peso en la trama, lo que provoca que el interés por la investigación se acabe diluyendo poco a poco hasta el punto de que no hay apenas suspense por saber quien es el asesino, el interés de la cinta se va perdiendo poco a poco, quedando algún momento aislado, el trabajo de la pareja protagonista (principalmente para aquellos que sólo los conocíamos en papeles cómicos) y poco, muy poco más.
Y una pregunta ¿a qué viene tanto plano cenital?
En definitiva, una prueba más de que los defensores del cine español "porque es español" parecen empeñados en convertir en joyas a algunas "pelis" sólo por su origen y no por sus virtudes.
