sábado, 7 de marzo de 2015

KINGSMAN. SERVICIO SECRETO de Matthew Vaughn



   Mathew Vaughn lo ha conseguido de nuevo. Tras las estupendas KICK-ASS y X MEN PRIMERA GENERACIÓN, pese a quien pese la mejor "peli" de la franquicia, sale airoso de una empresa, otra adaptación de un comic,  que en otras manos podría haber caído en el ridículo o en el mero espectáculo sin alma. Y es que esta adaptación de un comic, que no conozco, resulta una muy entretenida parodia del cine de espías que consigue mantener en todo momento el equilibrio entre la seriedad y la comedia, entre la acción más clásica y la más disparatada

   Hay un momento en esa cena de lujo, con comida de McDonalds, entre los personajes de Colin Firth y Samuel L. Jackson en que se dejan las cosas muy claras. “¿Le gustan las películas de espías? Pregunta uno de los personajes. “Si, pero las de antes, en las nuevas se lo toman todo demasiado en serio” responde el otro. Y eso es precisamente KINGSMAN. SERVICIO SECRETO, una cinta de espías con un argumento tan disparatado como los de los primeros Bond, o las de Flint, pero narrado de manera frenética como se lleva en la actualidad.

   Básicamente tenemos dos historias que se acabaran cruzando: por un lado el examen/reclutamiento de un grupo de jóvenes para lograr el único puesto vacante de agente secreto (¿recordais el principio de XXX?); por otro la investigación de una serie de desapariciones en las que parece estar implicado un magnate de la informática.

   Tenemos homenajes a todos los agentes secretos que en el mundo han existido, desde James Bond hasta el de XXX pasando por el SuperAgente 86(genial el chiste sobre el zapatofono).


   Colin Firth interpreta al típico espía británico elegante y educado frente al personaje de Taron Egerton, un joven de clase baja pero muy inteligente (genial es chiste sobre MY FAIR LADY) y ágil más próximo al de XXX, de echo las pruebas a superar para ocupar el puesto de agente nos recuerdan aquella cinta con Vin Diesel.

   Samuel L. Jackson es un villano que no desmerece nada al Blofeld de los primeros Bond o a cualquiera de sus secuaces de Spectra ("Ahora te explicare cual es mi plan y luego pensare en una forma retorcida de matarte de la que lógicamente podrás escapar" viene a decir en un momento de la cinta) y cuenta con una ayudante que tampoco tiene nada que envidiar  los ayudantes de aquellos (esas piernas ortopédicas con cuchillos/espadas retráctiles) interpretada por Sofia Boutella.

   Y como secundarios de lujo: Michael Caine (que interpreto a otro popular espía, Harry Palmer, en 5 películas), Mark Strong y, en un papel más breve, Mark Hamill.



   Como he dicho una cinta tremendamente entretenida que sabe equilibrar drama (la historia sobre el padre del joven protagonista o su situación familiar), las escenas más cómicas y los momentos de acción desenfrenada sin provocar esa sensación de indefinición que provocan otras "pelis" que parece que no saben hacia donde dirigirse, y que también sabe mezclar el humor más refinado con otro más simplón o vulgar pero igualmente divertido.

   Resulta curioso esa costumbre del cine ingles actual  de presentar como (anti)héroes de la historia a chavales  de  barrios  marginales  y  de  vidas no  exactamente  legales, como  los  de ATTACK THE BLOCK o, en menor medida, TOWER BLOCK

   Un detalle que personalmente me gusto mucho: esos primeros títulos de crédito con los restos de las explosiones transformándose en letras.

   Muy recomendable para los fans de las "pelis" de espias en su variante más desmadrada, vamos para los que echamos mucho de menos los disparatados planes de Spectra y a esos espías que apenas se despeinaban o arrugaban el traje.

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