viernes, 1 de junio de 2012

AMERICAN PIE. EL REENCUENTRO de Jon Hurwitz y Hayden Schlossberg

     Lo mejor que puedo decir de esta nueva entrega de AMERICAN PIE es que es decepcionante. Las anteriores entregas contaban con directores diferentes pero mantenían guionista, Adam Herz, que conocía a sus personajes (como si los hubiese parido) y sabia perfectamente que hacer con ellos y hasta donde podía llevarlos, pero en esta ocasión los nuevos guionistas (y también directores) no han sabido crear situaciones nuevas ni divertidas. Y como muestra la escena de arranque, la unica puramente AMERICAN PIE, que sobre el papel es divertida pero esta tan mal planificada que apenas funciona.

     La historia parte, ya de entrada, de un tópico de las "pelis" americanas, la reunión de antiguos alumnos, excusa perfecta para reunir a la pandilla de nuevo, pero los conflictos que se estableen entre ellos son los de siempre. Sólo los personajes de Jason Biggs y Alyson Hannigan han pasado a otro nivel, ahora casados y con un crió han visto como su vida sexual se ha reducido al mínimo y además Biggs es tentado por una jovencita a la que cuidaba como canguro cuando era pequeña. Thomas Ian Nicholas y Tara Reid repiten básicamente la historia que ya nos contaron en la segunda entrega, Eddie Kaye Thomas (Finch) tiene un ligue, que no es la madre de Stiffler para variar, y Chris Klein y Mena Suvari siguen siendo la parte empalagosa de la trama.

     Además la reaparición de algunos personajes habituales de la saga es puramente anecdótica, Shanon Elizabeth, Natasha Lyonne o Chris Owen apenas se dejan ver, los chicos MQMF (MILF en el original) no tienen apenas una linea de dialogo divertida, los nuevos personajes no aportan nada, vale Katrina Bowden luce tipazo (que no esta mal) pero me consta que a esta chica se le puede sacar mas partido (si no habéis visto TUCKER & DALE VS EVIL ya estáis tardando) como actriz, y, el colmo de los colmos, se desaprovecha totalmente un cameo de Neil Patrick Harris.

     En fin, que salvo algunos momentos al servicio de Sean William Scott (Stiffler), especialmente los últimos minutos, o de Eugene Levy (el padre de Jim) y algún detallito suelto en el momento en que los chicos de la pandilla tienen que colar en su casa a la vecina adolescente de Jim, borracha y desnuda, sin que los padres se enteren, la "peli" decepciona y aburre. Una pena porque las anteriores entregas (al menos las cinematográficas) habían sido bastante divertidas. 

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