NEW EVILBRAIN666: SATISFACTION. SEXO SIN TAPUJOS

Una película de JACQUES FLETCHER

El pasado martes 23 de junio asisti, en los Cines ABC PARK de Valencia, a la Premiere de la Opera Prima en el largometraje de Jacques Fletcher, SATISFACTION. SEXO SIN TAPUJOS.

Una reunión de amigos y conocidos, de distinta condición y variados gustos sexuales, arranca con una especie de juego conversación, basada en que cada uno de ellos se presente diciendo cuál es el articulo que los define (el, ella, elle); su condición sexual (un hetero "de los de toda la vida"; una hetero "que en su juventud experimento con amigas"; un gay; una "trans" "totalmente operada"; otra "trans" que "se ha tratado pero conserva su pene"; una mujer sin un gusto definido; a los que se unira más tarde otra hetero con gusto por que la dominen); y que es lo que les gusta en cuestiones de sexo, amenizado con alguna que otra anecdota.

Durante la conversación irán surgiendo momentos a veces divertidos, a veces dramáticos, en ocasiones curiosos, donde la orientación sexual de cada uno en ocasiones le llevara a valorar algunas detalles de la cinta de manera algo polémica. Como ya le comente al montador de la cinta, Fran J.S.C., mientras grababa un video con las reacciones, al personaje del varón heterosexual (más allá de su gusto por los toros) le suelen caer palos por todas partes, aunque previamente alguno de los otros ha venido a decir lo mismo, pero orientado a su orientación (valga la redundancia).

Por ejemplo, la "trans operada" comenta que ella nunca "come coños", y nadie le dice nada ni la contradice porque es su opción, pero cuendo este comenta lo mismo sobre "las pollas" todos (o casi todos) se meten con él por no experimentar; aunque irónicamente esta pareja acabara siendo la que más carisma desarrolle entre ellos.

Animo a los representantes del resto de colectivos a manifestar sus acuerdos o desacuerdos con lo que alguno de los personajes decía en pantalla, ya que este tipo de trabajos debería invitar a eso, a reflexionar, y a que cada uno de su opinión.

La cinta cuenta con un reparto que incluye a la influencer y activista LGTBIQ+, Daniela Requena, los actores valencianos Javier Romero y José Domenech y la primera fallera mayor transexual de la historia, Lía Sánchez Carballo.

El pase en esa Premier funciono muy bien, la Sala prácticamente llena, así que de momento las proyecciones se han ampliado, y se podrá ver la cinta los martes, miércoles y jueves a las 20:20.

Le he enviado al realizador y guionista de la cinta uno de mis habituales cuestionarios, porque nadie mejor que él para que nos explique los detalles fundamentales de la cinta. Aquí os dejo sus respuestas:

+ Cuéntanos, con tus propias palabras, y sin cometer mucho “spoiler” ¿Qué es lo que puede esperar el posible espectador de SATISFACTION. SEXO SIN TAPUJOS?

Es muy difícil hacer spoiler porque la película es la conversación, y ahí radica su interés. Esta película no deja de ser un experimento, Un experimento cinematográfico, eso sí. Yo la definiría como una película que, sin ser documental, porque no lo es, forma parte de la realidad. De una realidad que muy pocos se atreven a hablar. Un amigo me dijo que es una película “la vieja al visillo” de José Mota, porque es la posibilidad de escuchar una conversación interesante y privada, pero con la comodidad de que no tienes que estar mirándola por una mirilla por temor a que te descubran. En cambio, puedes hacerlo sentado tranquilamente en el asiento de un cine. En definitiva, participas en una charla animada e interesante sin tener que hacer nada, salvo ser un espectador.

Aunque sí hay una parte de guion, en su mayoría, todo lo que se ve es real. Lo bueno es que nadie distingue donde está una cosa y dónde la otra. Y así pretendo que siga siendo. Quiero que la gente disfrute del film (97 minutos) sin plantearse nada más. Que la gocen sin más aditamento. Quizás dentro de unos años, la si película trasciende de alguna forma, explique dónde está el guion.

+ ¿Qué influencias has tenido, ya sea para esta cinta, ya sea en el conjunto de tu carrera?

Mi influencia es el cine en general. Soy amante del cine desde niño y, como escritor que soy desde hace 30 años, siempre quise que mis guiones acabaran en un film. Empecé con cortometrajes, uno de los cuales fue muy premiado sobre todo en EEUU, y ahora, acabo de dar el salto al largometraje. Por suerte, está teniendo una acogida espectacular y nos han dado una semana más en el cine. Si sigue así, podría estar más tiempo y dar el salto a Madrid.

+ Hablanos un poco del reparto de tu cinta ¿Cómo lo seleccionaste, como fue trabajar con ellas y ellos?

Trabajar con ellos fue muy fácil (a pesar de que solo tres, de los siete que componen el elenco, son actores). Y esto fue así porque hice un casting muy duro. Me tocó rechazar a mucha gente porque necesitaba que el equipo estuviera bien comprometido a hablar de sexo sin tapujos y que hubiera armonía entre ellos. Sin que destripemos nada, todos ellos tienen una sexualidad tan heterogénea que, al principio, me preocupaba que fueran a soltarse como al final lo hicieron. Otro de mis miedos era cómo iba a reaccionar el público al tratarse de una película que se desarrolla íntegramente en un salón. Por suerte, en postproducción, le dimos mil vueltas al montaje para que todo quedara correcto y nadie, en ningún momento, mirará el reloj o se aburriera en ningún instante. Por fortuna, lo hemos conseguido y la película funciona a las mil maravillas hasta el punto que muchos nos dicen que se le ha hecho corta, a pesar de durar una hora veintiséis minutos.

+ Y ¿Qué nos puedes contar del resto del equipo?

Al ser una producción con un presupuesto muy limitado, el equipo también lo es. Por suerte he contado con grandes profesionales que me han apoyado desde el principio, sin pedir nada a cambio. Desde los cámaras o director de fotografía (rodamos con cuatro cámaras simultáneamente), hasta nuestro montador Fran J.S.C, pasando por mi socio y productor (y también actor de la película); hasta los inversores que confiaron en nosotros aportando capital. Todos hemos sido una piña que ha conseguido que esta película sea totalmente profesional y tenga un resultado óptimo. El público nos cuenta de lo amena que es, de las risas que se han dado en los momentos cómicos, de los momentos trágicos y de lo mucho que aprenden con ella, pues nos aseguran que es también didáctica. La verdad que con este equipo con el que he contado mi labor ha sido mucho más fácil.

+ ¿Alguna escena o momento que destaques, ya sea por la dificultad al rodar, lo divertido del momento o por alguna anécdota curiosa?

Momentos divertidos no hay muchos, la verdad, cuando tienes que rodar a toda pastilla porque el tiempo y el escaso presupuesto se te echa encima. Sí hay miles de anécdotas; por ejemplo, tener que interrumpir el rodaje porque todos hablan al mismo tiempo y eso, en montaje, es inviable (recordemos que solo había dos actores) o tener una legión de curiosos que querían ver el rodaje y tener que echarlos a otro lugar para que no se oyera ni una tos o una risa. Recuerdo también el momento en el que rodamos el inicio de la película, que es cuando los intérpretes llegan a la casa y tienen que saludarse. Esto se rodó al final, y los no actores no entendían como podía ser eso si ya la conversación se había producido. Convencerles que en el cine la cosas no son cronológicas, no lo entendían demasiado. En ese momento sí me reí. También conseguir que se acostumbran a las cámaras (la rodamos con cuatro cámaras), y a tantos técnicos ir de aquí para allá.

Fueron varias cosas las complicadas. Lo primero, conseguir el capital para poder rodarla y todos los escollos que hemos pasado. Pero lo que más me preocupaba era conseguir que una película que transcurre íntegramente en un salón, sin más acción que una charla, fuera dinámica y no aburriera a nadie en ningún instante; muy lejos de eso, que la gente estuviera atenta todo el tiempo. Me baso en la idea de Steven Spielberg que decía: “si en la proyección de una película alguien mira el reloj, has fracasado”. Por suerte, esto no pasa con Satisfaction: Sexo sin tapujos. Estando en la sala de cine, con casi 500 personas de espectadores, mi única preocupación fue observar la reacción del público. Ni un solo teléfono móvil se encendió. Las caras de la gente eran de concentración, y las risas, en los momentos humorísticos, era evidente. La gente salió muy contenta y sorprendida, y ese era mi objetivo.

+ ¿Algún proyecto del que puedas hablarnos?

Por supuesto. Nosotros no nos quedamos ahí. Ya hay varios proyectos en manos de Netflix, pero es prematuro adelantar nada de momento. Avanzo paso a paso, como buen capricornio que soy, y eso, de momento, debo dejarlo ahí. Eso sí, si la cosa va bien, puede que esta película acabe ahí, en Netflix.

FILMOGRAFÍA DE JACQUES FLETCHER (Agradecer al autor los enlaces)

Cortometraje "La Familia: Una casa encantada"