SCREAM VI

de Matt Bettinelli-Olpin y Tyler Gillet

Pues sintiéndolo mucho, muchísimo, me va a tocar hacer otra vez el papel de "hater", y decir que, al igual que me paso con la anterior "no me ha gustado nada la nueva entrega de SCREAM".

Muchos me saldrán con aquello de "si no te gustan los slashers, no los veas y punto". Pero si alguien me sale con eso a mí, es que no me conoce de nada, y no podré evitar echarme unas risas. Y si, como me suele decir mi amigo David, quizá mi problema es que soy demasiado "tiquismiquis" (aunque yo lo veo como que no me gusta que me tomen el pelo), pero es que hay cositas (lógica argumental, coherencias de continuidad) que sintiéndolo mucho no puedo dejar pasar, y que me sacan de algunas "pelis" sin remedio. Pero, es que si además, la cinta no consigue ni crear suspense, en estas últimas entregas los asesinatos son anticlimáticos, por muy bestias que (supuestamente) sean; ni divertirte con los juegos referenciales (la especialidad, hasta el momento, de la Saga), apaga y vámonos.

"Esto ya no es una Saga, es una franquicia. Ahora lo importante es mantener la "marca", los personajes ya no importan. Cualquiera puede morir, cualquier cosa puede pasar".

Esta es la premisa (palabra más, palabra menos), supuestamente original en la que se basa esta nueva entrega, y que sirve para justificar algunos detalles, pero que rompen de manera alarmante con otros (y voy a dejarlo aquí, porque me estoy mordiendo la lengua/rompiendo los dedos para no teclear spoilers).

Y aquí nos encontramos con el problema de reseñar una cinta como esta, ya que la mayoría de mis pegas son de carácter argumental, y no puedo citarlas sin contar, o desvelar, las sorpresas de la trama.

Pero, he dicho la mayoría, que no todos. Ya que como ya he comentado antes, los asesinatos de esta nueva entrega carecen de un mÍnimo de tensión o suspense; la lógica desaparece demasiado a menudo, por ejemplo, sabiendo como actúa(n) los Ghostfaces, ¿a nadie se le ocurre hacerse con un arma para defenderse?; hacemos una reunión para ver que hacemos, pero dejamos a una del grupo fuera de ella, y sola en otra habitación.... Y esto es grave, porque en las entregas guionizadas por Williamson, este se lo curraba para justificar esas situaciones, cosa que en esta ocasión no ocurre. Pero ¿se lo perdonamos porque es SCREAM?. Pues yo NO.

Además, la parte de las reglas, y los juegos referenciales, que como ya he comentado antes, eran la especialidad de la "marca", ya no funcionan porque en realidad no existen, se las van inventando para justificar ciertos hechos, pero luego se olvidan de ello por completo (SPOILER - por ejemplo con los "cuatrivivientes" - FIN SPOILER)

En resumen: Otra decepcionante entrega de SCREAM, carente del alma, y ritmo de las cuatro primeras, especialmente la uno y la dos.

El único detalle que me hizo gracia fue el primer encuentro entre los personajes de Courtney Cox y  Hayden Panettiere ("Tu agente del FBI, pero si eres una cría" / "¡Eh!, que ya tengo 30 años"). Pero es que a mí esos detalles/bromas extracinamatográficas siempre me han hecho gracia.