LLAMAN A LA PUERTA de M. Night Shyamalan

Shyamalan es uno de esos directores encumbrados al Olimpo con sus primeras películas, en realidad la tercera (EL SEXTO SENTIDO) y la cuarta (EL PROTEGIDO), y que después, a pesar de ir cuesta abajo, muchos de sus fans se han empeñado en mantener en el, aunque hace mucho, mucho tiempo que, salvo quizá con SEÑALES, no ha hecho más que decepcionar al personal, a pesar de contar en muchas ocasiones con buenas, o prometedoras, premisas.

También ha jugado en su contra, aunque en realidad es algo que se ha buscado él mismo. el que esos primeros éxitos basaran buena parte de su impacto en el giro/sorpresa final, forzando a cintas que no lo necesitaban a tenerlo, por aquello de "el toque Shyamalan".

Y LLAMAN A LA PUERTA, es una nueva confirmación de lo expresado anteriormente.

A partir de una novela, que no conozco, así que no se si los defectos ya estaban en la novela o son cosa de los guionistas, de Paul Tremblay (THE CABIN AT THE END OF THE WORLD), el realizador se monta una película que mezcla "home invasion", "cine de catastrofes", "cine apocalíptico", y, porque no, "religioso".

Un matrimonio gay y su hija adoptada están pasando unos días en una cabaña en el bosque. De repente el lugar es invadido por un grupo que les anuncia que su familia ha sido la elegida para sacrificarse si quieren evitar el apocalipsis que acabe con el mundo, y...

Los primeros minutos de la cinta, con la llegada de los "intrusos" poseen algo de tensión, pero una vez propuesto el elemento supuestamente interesante o novedoso, la cosa se estropea ya que la cinta cae en uno de esos típicos suspenses basados en "sera verdad lo que dicen o están locas esas personas", que si has visto algo de cine ya sabes por donde va a derivar.

Y a partir de aquí los problemas de la cinta son varios. 

No explica absolutamente nada, y las cosas pasan porque si, a capricho de los guionistas. Y ya se que muchos me diréis aquello de "Es que necesitas que te lo den todo mascado", y yo contestare "No, lo que necesito es algo de lógica, y no que esto sea así porque si".

La cinta se vuelve repetitiva, y no tiene un argumento que anime la acción, no solo se basa en repetir situación con distinto personaje, si no que, para rellenar metraje, además, recurre a unos flashbacks para que, supuestamente, conozcamos mejor a la familia protagonista, pero que no aportan nada a la historia, y además son de un tópico que tira de espaldas.

Y al final cuando resulta que..., pues como ya he comentado antes, no hay una explicación coherente para ello; es así porque así lo requiere el suspense... o el mensaje oculto que quiero mandar (aunque aquí puede que yo me ese montando mi propia película).

En resumen: Otra decepción, y van, de Shyamalan. Aburrida e ilógica, y que deja demasiado sin explicar.