domingo, 14 de junio de 2015

INSIDIOUS CAPITULO 3 de Leigh Whannell

   INSIDIOUS fue una de las más agradables sorpresas que nos llevamos en una sala de cine allá por 2010. Sugestiva vuelta de tuerca al esquema de las “pelis” de casas encantadas, genial ese momento “no es la casa, es el niño”, Wan, que ya había dado muestras de su buen hacer en el genero en la primera entrega de SAW (recomendable también el corto del propio Wan del que surgió la “peli”) o en la discreta SILENCIO DESDE EL MAL (ejemplo de flojo guión salvado por la realización), y su guionista habitual Leigh Whannell (SAW – corto y “peli” -, SILENCIO DESDE EL MAL), que se reservaría como en SAW un papel como actor (Specks, uno de los ayudantes de la médium) consiguieron una efectiva cinta llena de tensión y algunos, muchos, buenos momentos.

   El éxito de la cinta provoco la realización de una secuela, de nuevo con Wan y Whannell como responsables. Conscientes ambos de que ya no había mucho de donde rascar ambos se dedican a jugar tanto con la historia, dándole no una sino varias vueltas de tuerca, como con la realización (planos, encuadres, movimientos de cámara). El resultado una digna, y algo extraña, secuela que aunque dejo descolocados a muchos de los fans de la original cerraba (?) con eficacia la historia pero dejando la puerta abierta a una continuación con los personajes de Elise (Lin Shaye), Tucker (Angus Sampson) y Specs (Leigh Whannell).


   Ahora nos llega INSIDIOUS CAPITULO 3, que  ya no cuenta con Wan como realizador pero sigue apareciendo en los créditos como productor además de realizar un cameo, pero mantiene a su guionista Leigh Whannell, que no solo  sustituye a Wan en la dirección sino que repite en el papel de Specs.

   ¿Y que se puede decir de INSIDIOUS 3 aparte de que es una presecuela y que juega con la misma base de partida de las anteriores, osea fantasma parasitario que persigue a una victima inocente, en este caso una adolescente (Stefanie Scott)? Pues básicamente que resulta una “chorradita” entretenida. Vamos que el guión es de una simpleza abrumadora pero que Whannell es consciente de ello y ha rellenado los puntos flacos de este recurriendo a colocar un buen monton de sustos, muchos de ellos bastante efectivos, para animar la función.


   En la parte negativa: algunas partes del guión, muy simples y que se limitan a repetir con escasas variaciones el esquema de las anteriores; personajes que desaparecen de repente (¿donde se ha metido el hermano durante la parte central de la cinta?, ¿que ha sido del vecino que "babea" por la "prota"?) o que no se aprovechan (la vecina con alzheimer prometía bastante tras esa conversación con la "prota" y luego...) y Dermot Mulroney (igual es cosa mía pero es que este actor siempre me ha parecido de un "soso" aplastante).

   En la parte positiva: la realización de Whannell que, aunque queda algo lejos de la de Wan, apunta maneras tratándose de una opera prima; la efectividad de muchos de los sustos que inundan la cinta, que te hacen olvidar los "defectillos" del guión; la médium y los cazafantasmas Tucker y Specs (ojo a a momentos como en el que se conocen o en el que deciden trabajar juntos) y el diseño de producción que consigue "cosillas" bastante inquietantes.

   Pues lo dicho, inferior a la cinta que lo inicio todo (algo habitual en las sagas) pero lo suficientemente distraida para pasar un buen rato. Se deja ver sin ningún problema y, como ya he mencionado, algún "sustillo" te llevas.

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