Resumo, y simplifico para evitar descubrir las sorpresas y giros, la trama de esta nueva aventura en solitario de Lobezno. Tras los acontecimientos de X-MEN. LA DECISION FINAL nuestro amigo Logan viven en plan "loco de la montaña" sufriendo recurrentes pesadillas en las que se le aparece Famke Janssen (que como pesadilla no esta nada mal) cuando se presenta ente él una mutante. El jefe de esta, un japonés, al que Logan salvo la vida hace ya tiempo esta a punto de morir y quiere reunirse con Logan en Japón para poder despedirse. Una vez allí y tras el fallecimiento de este, Lobezno se vera metido en un asunto de luchas de poder y Yakuzas mientras trata de salvar a la nieta del japonés. ¿Cuál es el problema? Pues que no sabemos porque la capacidad de Lobezno para curarse y sanar sus heridas se a visto muy reducida y ahora las balas y las espadas le hacen bastante daño.
En primer lugar aclarar que aunque me parecen bastante distraídas no comparto el febril entusiasmo que muchos tienen por las dos primeras entregas de la saga, ya saben las dirigidas por Singer, que suelen figurar en las listas de las mejores "pelis" de Superhéroes y que tal vez por ello las cintas que los fans de estas consideran más decepcionantes o aburridas, LA DECISION FINAL o la primera en solitario de LOBEZNO a mi me parecen bastante aceptables y entretenidas, si vale inferiores a las dos primeras pero entretenidas. Para mi la mejor de la saga, en todos los sentidos, es X-MEN. PRIMERA GENERACION.
Así pues esta nueva entrega sigue la línea general de la saga, es distraída y se deja ver con agrado pero dudo que aparezca nunca en un TOP TEN sobre "pelis" de Superhéroes.
Y es que ese "rollete" del Superhéroe con traumas a cuestas si ya me cuesta, y esta es una apreciación personal, entenderlo, y más cuando el tipo en cuestión ya lleva una larga temporada cargando con sus superpoderes; en el caso de los mutantes que como Lobezno nadie se percataría de que lo son hasta que usan su particular mutación, las garras, ya me resulta un tanto absurdo. Aun así gracias al buen hacer de Jackman, y de Jenssen en las escenas oníricas, se consigue dotar de cierta credibilidad esa parte de la historia.
El problema es que la historia es en su mayor parte típica, ya saben rico y poderoso que muere, luchas familiares por la herencia y todo lo que ella conlleva, la Yakuza metida de por medio y los intentos de darle complejidad dotando a esta de sorpresas, giros y demás acaban provocando cierta confusión, en lugar de complejidad, que a la historia no le hacia falta.
Afortunadamente la parte "mutante" de la trama salva la función, tanto en la parte digamos dramática determinada por la perdida de parte de sus poderes del protagonista como el la parte de espectáculo que se le supone a este tipo de cintas y que incluye momentos tan espectaculares como la pelea sobre el tren bala o el asalto final a la fortaleza del malo.
Los actores están bien, Jackman se siente cómodo con el personaje, especialmente cuando más borde se pone, y Janssen aporta un poco de ternura al "fantasma" de Jean Grey. La pega es que algunos personajes no están todo lo aprovechados que deberían especialmente las dos mutantes, tanto a Yukio (Rila Yukishima) como especialmente a Viper (Svetlana Khodchenkova) se les podía haber sacado más partido. Por no hablar de ese arquero con una prometedora primera intervención que luego se diluye lentamente.
Para pasar el rato.
Un aviso. No salgáis huyendo cuando arranquen los créditos. Hay una sorpresita escondida entre ellos.
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