Aprovecho de nuevo la oferta de las terrazas de verano para ver cine al aire libre. De nuevo en la Terraza Lumiere de Alboraya. Y esta vez un programa doble lleno de trucos de magia, mentalismo e hipnosis.
AHORA ME VES... de Louis Leterrier
La película va de magos, de magos que utilizan sus habilidades para cometer atracos de lo más rebuscados e ingeniosos ¿o no? Porque como en los mejores trucos de magia hay algo oculto bajo la manga y nada es lo que parece, y en esta cinta eso ocurre en más de una ocasión.
Tras unas simpáticas presentaciones de los cuatro magos protagonistas, especialmente la del mentalista (Woody Harrelson derrochando carisma), estos reciben unas invitaciones para reunirse en un misterioso lugar. Un año después los cuatro trabajan en un espectáculo conjunto en Las Vegas durante el cual roban un banco en PARIS. Un agente del FBI unido "a la fuerza" con una agente de la INTERPOL, por un lado, y un antiguo mago que se dedica a descubrir y desacreditar a otros, por otro, intentaran averiguar lo ocurrido... (y hasta aquí puedo leer sin descubrir las sorpresas, giros y, porque no decirlo, trucos sacados de la manga que se reserva la cinta.
Que la cinta es tramposa, por supuesto; que se guarda información para más tarde sorprender, de acuerdo; pero como los propios protagonistas explican en más de una ocasión el truco consiste en hacerte mirar la mano izquierda mientras el truco se esconde en la derecha. De hecho se trata de una de esas cintas en las que momentos en principio intrascendentes, aquel en que Jesse Eisenberg intenta hacer de mentalista con Michael Caine por ejemplo, luego tienen una importancia vital o conversaciones que en principio no tienen relevancia acaban jugando un papel fundamental, así que "ojito" vais avisados.
Todo ello aderezado con un carismático reparto totalmente entregado, desde los magos: Eisenberg, Isla Fisher (esta chica se merece ya papeles interesantes), Woody Harrelson (que se lo pasa en grande) y Dave Franco (¡ese momento Gambito!), pasando por los "polis": Mark Ruffalo (su rostro entre el asombro y la incredulidad después de cada golpe lo dice todo) y Mélanie Laurent; y, como no, los veteranos Morgan Freeman y Michael Caine (atención a sus escenas durante el segundo espectáculo y el truco de las cuentas bancarias).
El francés Louis Leterrier, responsable de la segunda y mejor entrega de TRANSPORTER, dirige con habilidad y dinamismo la cinta, incluso los momentos en que mueve la cámara lo hace para seguir, o mejor perseguir, a algún personaje y no para marear que suele ser lo habitual.
En definitiva, como en todo buen espectáculo de magia, distracción y entretenimiento, que no nos engañemos es lo que la cinta pretende ofrecer. Pues bien, objetivo cumplido.
EL HIPNOTISTA de Lasse Hallström
Thriller de ritmo excesivamente lento y pausado que en su afán de querer contar muchas cosas termina no sólo por no desarrollar demasiado bien ninguna de ellas sino provocando que muchas situaciones acaben resultando forzadas, Demasiadas casualidades que no puedo exponer para no fastidiar los giros de la cinta pero que pesan mucho, muchísimo.
La base de la historia es el brutal asesinato de una familia. El único superviviente, uno de los niños, esta en estado comatoso y la única forma de conseguir información de él es recurrir al HIPNOTISTA del titulo. El policía judicial que llego primero al lugar del crimen no cree la versión oficial, que ha sido cosa de las deudas del juego del padre, y piensa que el niño, y una hermana que no estaba en la casa pueden estar en peligro.
En su afán de seriedad y de trascender del simple relato policiaco y de suspense, la película va dando saltos entre la investigación policial, la única que aporta algún momento interesante aunque se deba principalmente al correcto trabajo del actor Tobias Zilliacus, y las escenas familiares del hipnotista con drama familiar a cuestas, desarrollado de la forma más aburrida posible y con unas interpretaciones excesivamente frías (volvemos a lo del ritmo pausado) que no casan con las discusiones que se supone están teniendo los personajes; que se vera involucrado de manera más personal en el caso cuando su hijo sea secuestrado (que por cierto, secuestran al niño, drogan a la madre y la policía ni siquiera registra la casa siendo la madre la que descubre las pintadas en el estudio).
Por si todo esto fuera poco al final, el único momento de "tensión" de toda la cinta va precedido de momentos absurdos del tipo (OJO SPOILER), el "poli" se lleva al lugar donde esta la responsable del secuestro no a los agentes de apoyo sino a los padres del secuestrado, la culpable de todo que ha sido lo suficiente hábil como para realizar un par de actos que requieren planificación e inteligencia (el secuestro entre otros) de repente pasa a convertirse en una "tarada" de manual...
Lenta, muy lenta, y aburrida (y me quedo corto).
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