La primera entrega de esta saga fue una agradable y divertida sorpresa, una comedia de ciencia ficción, con toques absurdos y surrealistas, que funcionaba a la perfección y en la que el contraste entre Will Smith y Tommy Lee Jones daba lugar a momentos muy divertidos.
La segunda entrega fue una decepción, la película se limitaba a repetir el esquema de la anterior pero con bastante desgana (como si estuviera hecha por puro compromiso) y sin aportar ninguna novedad realmente destacable.
Catorce años después de la primera entrega (hecho que el protagonista recalca en un par de ocasiones) llega la tercera entrega que se encuentra a medio camino entre ambas.
En esta ocasión el film utiliza el tema de los viajes en el tiempo, escusa perfecta para que Josh Brolin sustituya a Tommy Lee Jones interpretando (con nota) al mismo personaje, pero más joven.
Sin el efecto sorpresa de la primera (un servidor no conocía la existencia de los comics y no sabía exactamente lo que podía encontrarse) la película es entretenida y tiene sus buenos momentos de humor (muy bueno lo de Andy Warhol), aunque hay que reconocer que el carisma de Will Smith aporta mucho a algunos diálogos que en otra manos (o debería decir boca) no tendrían tanta gracia.
A destacar el personaje de Griffin (Michael Stuhlbarg), un extraterrestre que conoce todos los posibles futuros tras cualquier situación, y lamentar que se desaproveche tanto a Emma Thompson como a Alice Eve, que interpretan al mismo personaje en varias épocas (yo hubiese preferido saber algo más de ese posible romance ente K y O - genial lo de Smith "yo llamo a todos los hombres K y...).
Para pasr un rato sin complicaciones.
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