miércoles, 14 de febrero de 2018

PORTADAS DE COMICS - X-MEN Nº141

 Por John Byrne


Inauguramos nueva sección, la cual va a consistir en presentar portadas de cómics, de diferentes épocas, autores, editoriales y temáticas, las cuales por una u otra razón (importancia, belleza, significado..., para el que subscribe, claro), han pasado a la historia. Repito, únicamente basado en mi criterio, no pretendo sentar cátedra, ni suponer que los demás las compartan.

Y para empezar os presentamos una de mi adorado John Byrne y mi querida Marvel. Siendo una de las mas icónicas de la historia del cómic, y por extensión, de su autor, de la serie y de su editorial. Os hablamos del X-Men nº141. Después de haber maravillado a todo el mundo en su extensa colaboración junto a Chris Claremont en el guión, levantando poco a poco desde el ostracismo la serie, (aunque ninguno de los dos autores tuvo nada que ver en el ya histórico Giant Size X-Men nº1, relanzamiento de los mutantes, casi desaparecidos del panorama, siendo este obra de Len Wein al guión y Dave Cockrum a los lapices, incorporándose cada uno por separado en diferentes momentos posteriores), y consiguiendo que esta fuera la colección referencia de la casa de las ideas (lo siento tenia que incorporar esta frase, no me podía resistir) en su momento, y justo (casi) después de su saga mas recordada, la celebérrima "Saga de Fénix Oscura", para el que escribe, tal vez igualada, pero nunca superada posteriormente, a pesar de las injerencias editoriales de Jim Shooter, el cual le costaría no pocos dolores de cabeza en años posteriores a Byrne (y a mas autores), o tal vez gracias a ellos, el caso es que grabaron a fuego en el olimpo del cómic, una de las sagas mas recordadas por los aficionados, va el dúo Claremont/Byrne (siendo el ultimo colaborador tiempo ha, en los argumentos de la serie), y se marcan una mini saga, de dos números, conocida como "Días del futuro pasado", la cual si bien no es tan celebre, ni redonda, como la de la pobre Jean Grey (nunca debieron resucitarla, pero ya sabemos como va esto), si que forma parte de las mas queridas y apreciadas (para mi iría detrás justito, a poca de distancia de la de Fénix), de los lectores. Y una de las razones principales fue su argumento, la ¿tipica? (eran los primeros 80, el tema no estaba tan sobado) historia de futuros alternativos, la tensión, el suspense, y claro, presentar a unos personajes conocidos (otros no tanto, o nada) en una situación muy distinta de lo habitual. La otra, el buen hacer del prolífico John (llegando a dibujar en algún momento de su mejor época, los 80, hasta cuatro series al mes, incluyendo el guión de algunas), con su estilo claro y "realista" de la vieja escuela. La portada en cuestión mezclaba de manera sabia, una estupenda composición, un trazo inmejorable, y el elemento principal, la sopresa. Sorpresa porque nos mostraba a unos acorralados, y avejentados, Lobezno y Kitty Pride, delante de un cartel, el cual, nos mostraba que diversos hombres X estaban, o bien presos, o muertos. ¿Que ocurría? ¿Como podía ser ? Ya nos tenían atrapados, sin remedio. Como decía, dos números, que sabían a poco, pero intensos, y nos dejaban con ganas de saber mas (Claremont exploró este futuro posteriormente, pero ya con otros autores). El final de la saga, en el siguiente numero, también nos traería una portada impactante (e impensable hoy día, por
la muerte de Logan) y espectacular, Lobezno y Tormenta siendo masacrados, hecho muy llamativo, sobre todo por el mutante de las garras, favorito de una gran mayoría de lectores, pero no tan redonda y conseguida que la anterior. En un futuro, valga la redundancia, muy lejano de aquel 1981, nos esperaba una adaptación cinematográfica, que, si bien no le hacia toda la justicia deseable al original, si nos traería una mas que competente versión la misma. 

Pero todo lo bueno no dura eternamente. Un par de números después, el dúo dinámico, para mi uno de los mejores equipos creativos de la historia, a la altura de Lee/Kirby o el propio Lee/Romita Sr., se rompió para siempre, volviendo a colaborar alguna vez mas muy posteriormente, pero lejos ya de su momento dorado en Marvel, siendo poco mas que una anécdota en sus currículums (o en estos tiempos, en la Wikipedia), y curiosamente en la "Distinguida Competencia" (tampoco me podía resistir a esto). Se que queda muy ochentero, pero es que en aquella época, se publicaron muchos de los mejores cómics que he leído jamas, comentario muy subjetivo claro, pero es que se sentaron las bases del cómic "moderno", y muchos de los mejores autores que este ha dado pasaron por el mejor momento de sus carreras.

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